viernes, 20 de diciembre de 2019

Ánimo y la Luna 



Noche tras noche veo crecer la Luna en su ciclo de cambio, como flor que florece. 

Como ella mi alma sentimientos acuna crece mi ánimo, es plano luego mengua y desaparece. 






Por Krieg.


Oasis


Para mí, eres un oasis 
Eres el agua fresca que calmó mi sed en un instante de eternidad distante, al caminar por mi desierto, como para permitirme un consuelo antes de continuar mi penosa marcha. 
Como una isla de remanso entre dos mares de tormento, en nuestro corto tiempo olvidé las tormentas de la infernal marea y soñé con la dicha y la calma. 
El poder de las alturas separó nuestros caminos, mas todavía espero el momento en que se encuentren de nuevo y poder olvidar de nuevo las penas que me agobian. 
¿Volveremos a vernos?
¿Acaso morirá la distancia y se llevará la ausencia que lacera para permitir descansar de nuevo como el oasis en el desierto de la vida?

viernes, 29 de noviembre de 2019

La ruleta de la muerte mexicana.

Son tiempos de agitación. Protestas en Haití, en Chile, grandes crisis en Venezuela y Argentina, por mencionar a unos cuantos. Y en México, nuestro México, la violencia está alcanzando niveles alarmantes. Tan alarmantes que a nuestras autoridades no les interesa en lo más mínimo. Se ofrece ayuda a otros países, se da asilo político a líderes extranjeros y por mientras ¿Qué sucede con los mexicanos? Nada.

Como siempre buscamos medios para paliar la inseguridad. Se hacen movimientos ciudadanos en el que personas normales les dicen a otros "si algo te pasa en la calle, tómame de la mano"; hay locales en los que se leen letreros como “Si alguien te está molestando o persiguiendo, pide ayuda a uno de nuestros empleados. Nosotros te ayudamos”. Pero nunca se menciona a la policía. ¿Por qué? Por qué la policía después de interrogarte a ti, víctima, averigua los hechos y con una excusa tan blandengue cómo "no se puede llevar ninguna detención o aplicar un castigo más severo; debido a que no hay leyes o no hay testigos o no estás muerta/ muerto". A veces se dan todas esas respuestas como una mezcla graciosa o irónica que deja en claro que el país, sigue y seguirá siendo una obra perfecta del surrealismo. (Pesadillas y sueños que se mezclan con la realidad).

¿Qué queda por hacer? Cuidarse. Solo eso. Es la única solución que nos damos entre nosotros. Soy mujer, soy de clase media (en México significa clase baja, que es muy orgullosa para llamarse a sí misma clase baja), Si soy franca temo por mi vida, por la vida de mi familia, la de mis vecinos, la de mis conocidos y sí, por la vida de tantos niñas y niños, de tantos adolecentes y mujeres que desaparecen a diario. Y por los que no se hace nada.
En cambio, hoy vi todo un operativo, por llamarlo de una forma, a toda la parafernalia desplegada solo para cuidar a un político, solo uno. El cual estaba de visita en un edificio gubernamental. Si todos esos policías y toda esa seguridad se aplicaran en la vida diaria de México ¡Qué país tendríamos! ¡Dejaríamos de temer por nuestra seguridad y por la seguridad de los otros! Las mujeres ya no tendríamos que estar viviendo bajo toque de queda, ni pensar dos veces en qué ropa usar y cuál no, para no llamar la atención. Ni temiendo que en cualquier momento alguien tomé a la fuerza un niño o a una niña. Ni diciéndonos entre nosotros "cuando llegues casa, me mandas un mensaje o me marcas para saber que llegaste [viva/vivo]".

Lo que más nos altera es saber que toda esa violencia permanece ahí, como una amenaza latente y silenciosa. Como una ruleta de la muerte. Por qué México no es zona de guerra pero está en los primeros lugares de violencia a nivel mundial. El gobierno (el presidente) y la CNDH recomiendan ser magnánimos con esos delincuentes. Tan solo con el narcotráfico el lema, no oficial, es "Abrazos y no balazos" es la estrategia política implementada en este sexenio. Hace unos días, el presidente de México no supo responder como actuar para paliar la violencia que se da en el país. Los crímenes cometidos son productos de locos y de drogados, es lo único que se puede sacar en claro de su respuesta.
Por mientras, y de acuerdo con cifras oficiales, en el país se llevan a cabo tres asesinatos de mujeres al día, con un total de 25,277 carpetas de investigación por feminicidios y delitos, de enero a junio del año en curso. Las edades de las víctimas oscilan entre los 3 años hasta los 70 años de edad. La saña de muchos de estos delitos son apabullantes y no olvidemos la cantidad de abusos y crímenes que permanecen en silencio, porque las víctimas prefieren callar, que pasar por un largo y cansino proceso jurídico en el que las autoridades se convierten en jueces y verdugos... de las mismas víctimas.

Cuidarse, rezar y hacer la vida "normal"; cuidándose de extraños y de salir de casa no muy temprano ni muy tarde, son algunas de las medidas que aplican los mexicanos para evitar lo que podemos definir “eufemísticamente” como la ruleta de la muerte mexicana o cómo no ser víctima de la creciente violencia en México.


Vird Āxōlōtl.
La Teoría del Rechazo



La condición de la naturaleza humana es una eterna lucha entre la razón que nos insta a buscar la elevación en la capacidad civilizadora del humano pensante y la condición instintiva intrínseca en la existencia del animal, condición que innegablemente está en nosotros, que se encuentra en lo profundo de nuestro subconsciente y que se manifiesta en nuestras acciones disimulada por nuestro proceder educado, entrenado para funcionar dentro de los cánones de la sociedad.

Y así como se muestra, quiero resaltar en esta oportunidad una reacción fácilmente ignorada (posiblemente porque no se quiera ver) que por instinto o naturaleza toma el ser humano, en contra de la razón, de la capacidad emocional compleja que nos conecta y demostrando en sus actos el propio instinto de supervivencia que permitió al ser humano superar los tiempos duros antes del cobijo de la sociedad.

Con “Teoría del Rechazo” hago referencia al hecho lamentable que se puede notar cuando una persona que goza de cierta estabilidad, salud e incluso capacidad económica y es apreciado y estimado, importante en su medio y grupo social; que de pronto sufre un repentino colapso, de salud o económico y de pronto se hace odioso y molesto a todos alrededor, que disimuladamente, como exigen las normas de nuestra planificada sociedad, comienzan a apartarse de esta persona, execrándole del grupo del que anteriormente era miembro importante, en el caso económico, notorio por las normas sociales, parece explicarse por la superposición del interés al sentimiento, sin embargo, es más complejo al hablar de un percance en la salud de la persona, donde cualquier excusa hace una brecha en nuestra imagen social, algo que el ser humano cuida a lo largo de toda su vida.

Es lamentablemente notorio que en la mayoría de los casos, al hacerse mayor una persona o sufrir una compleja enfermedad, especialmente si le deja postrado en el lecho, las personas cercanas comienzan a apartarse de este, limpiando su consciencia en razones rebuscadas mientras intentan siquiera olvidar la existencia de esta persona, relegada al “patio trasero” de sus consciencias.

Esto, sin embargo, como muchos misterios del comportamiento humano se explica mirando la naturaleza al comportamiento del resto de los animales, siempre relacionado con el instinto y comprendiendo su forma de actuar. Es bien sabido que las frutas se contaminan fácilmente al entrar en contacto con alguna que esté dañada, lo mismo ocurre con los animales, que por el instinto de preservación, para evitar la posibilidad de contagio de alguna posible enfermedad, se apartan de cualquier miembro que muestre claros síntomas de enfermedad; algo que se puede notar en los animales domésticos incluso a muy corta edad, en camadas de perros o gatos, animales que al nacer buscan permanecer unidos para mantener el calor corporal; cuando alguno comienza a padecer de alguna enfermedad, instintivamente los demás se apartan, abandonando a su suerte al enfermo.


De esta misma manera actúa el ser humano, incluso en casos donde la razón normalmente demostraría que es imposible un contagio, el instinto animal de la persona huye de aquel que ha sufrido una tragedia personal como intentando evitar que su situación negativa empañe su perspectiva de la realidad, en la que todos de alguna manera intentamos ignorar lo que lastima y sólo enfocarnos en lo que nos hace sentir bien.

Es lamentable que una persona que por casualidad o destino haya perdido su salud o estabilidad, de paso deba sufrir el duro golpe del rechazo, que podría hasta entenderse como una traición de parte de sus más allegados, demostrando que el sentimiento elevado está ligado a la razón y el instinto básico nos hace egoístas y crueles, siendo esta tal vez la verdadera naturaleza del ser humano.


Hago referencia a Kafka, y su famosa obra, “La Metamorfosis” en la que se expone de alguna manera esta situación, llevada a la ficción, si de pronto al amanecer nos vemos convertidos en un ser repulsivo a los ojos del mundo, quedaría pensar si los sentimientos de aquellos que nos rodean son tan profundos o siquiera tan razonables como para seguir a nuestro lado o si sus instintos crueles y salvajes les apartarían de nosotros.


No es necesario convertirse en un ser abominable, como metáfora, una persona que cae en desgracia, perdiendo su situación favorable por naturaleza se convierte de pronto en abominable, resaltando sus defectos, reconociendo que una persona que sufre de depresión demuestra el lado más negativo de su personalidad, ese es el momento de invocar a la civilización y como seres pensantes y razonables que somos, no dejarnos llevar por el instinto de apartarnos sino recordar el sentimiento que nos une a esa persona y en base a este, permanecer fiel a quien más necesite de un amigo.


Esta, como todas las muchas enseñanzas de la naturaleza, no es para quedarnos en ella sino para avanzar desde este conocimiento y poder corregir los errores que aquejan nuestra civilización, sea por naturaleza o por razón, y siempre intentar mejorar, pues al final de todo, el ser humano siempre avanza y la más elevada de las causas es estribar por la grandeza, perfeccionando al ser humano.

Krieg
06 de Noviembre de 2019

Ánimo y la Luna  Noche tras noche veo crecer la Luna en su ciclo de cambio, como flor que florece.  Como ella mi alma sentimien...